Hoy me enteré que para ser
de planta permanente hay que ganarse el puesto,
ganárselo mostrando
interés en el puesto, siendo diligente
en los pedidos de los regentes
y no tener otros trabajos aunque
no sea suficiente el sueldo abonado
en moneda corriente.
Además, no se puede bajar
el rendimiento; si no se lo
mantiene al rendimiento
dentro de una curva previsible
uno jamás va a ser de planta permanente.
Resulta que no tengo el mismo derecho
que mi abuelo me contaba, él que tenía
techo y estaba inserto en una relación
salarial en blanco. No poseo ese derecho histórico
y mi deber es ganármelo con el interés en mi puesto.
Hoy me enteré que sindicato no tengo.
No estoy afiliado a nadie que me abrigue gremialmente
y nadie a quien pueda darle un abrazo fraterno.
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3 comentarios:
El gato estaba en el sillón, durmiendo, con la cabeza para abajo como siempre, en esa posición que me hace pensar que sabe lo que es una anteflexión y que apoya su cabeza contra el suelo para estirar su columna.
Ah...bendita proactividad.
menos mal que todavía queda la militancia pauperizada...
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